La Diosa Selene

por **Marian de Stark** Vie Jun 29, 2012 8:51 pm

Benditos Sean !!
Hace Mucho que no entro al foro por cuestiones de tiempo. Pero ayer termine de leer Abrazada y como siempre hace la saga, me desperto la curiosidad. Hoy busque a ver si encontraba algo interesante sobre Nyx y me tope con esta información.
Es sobre una diosa llamada Selene. Es la diosa de la Luna. Y tiene varios puntos en común con Nyx (como la relación con los toros y la luna). Bueno aquí se las dejo. Besos.
Pd: les dejo la pagina por si quieren visitarla. [Tienes que estar registrado y conectado para ver este vínculo]

Selene, Titánide y Diosa de la Luna

Selene y Endimión.
Pintura realizada por Edward John Poynter.

Hija de los Titanes Hyperión y Tea, Selene era también una Titánide, aunque posteriormente se la nombrara siempre como Diosa y se la hiciera descender de Zeus. Selene, Titánide de la Luna, tenía un hermano, Helios, Titánide del Sol. Eran estos dos hermanos tan importantes, y su culto estaba tan extendido, que tuvieron que volverlo a emular en la nueva generación de Dioses olímpicos con el nacimiento de dos nuevos hermanos gemelos, Artemisa como Diosa de la Luna y Apolo como Dios del Sol.

Según Pausanias, Selene se enamoró de un pastor cario, Endimión, con el que tuvo cincuenta hijas, las Menae. Cada una de sus hijas gobernaba un mes lunar, siendo cincuenta lunas el equivalente a cuatro años o una olimpiada. El término olimpiada se refiere a una medida de tiempo de cuatro años tras los cuales se celebraban los Juegos Olímpicos, durante los que se establecía una tregua general en todos los estados griegos que se reunían en asamblea para resolver sus conflictos. El periodo de cuatro años también se considera la mitad de un Gran Año de origen minoico.

Selene, para no perder a su gran amor Endimión, le pide a Zeus que le conceda al príncipe pastor la inmortalidad, así que Endimión, quien tampoco quería separarse de su amada, acepta vivir en un sueño eterno, solo quebrantable bajo la presencia de su amada Selene, en una cueva del monte Latmos (Lidia). Esta puede ser la adaptación griega de un mito mucho más antiguo, donde los amantes eran Selene y Pan. En la imagen del principio del artículo, vemos a Endimión durmiendo entre amapolas, simbolizando el sueño eterno lleno de visones que estas producen por sus efectos narcóticos. Selene se acerca a él con un envolvente velo que simboliza el firmamento, y al fondo vemos la luna llena o creciente, según como se mire. En general, los colores del cuadro, son más terrestres que lunares, sugiriendo la verdadera naturaleza de Endimión. Así que para compensar, dejo otra obra de colores lunares, de la cual no he encontrado el autor ni la pintura completa, ya que a mi parecer está cortada, viendo sólo un trozo del corcel blanco que acompaña a Selene.

En otras imágenes encontraremos a Selene viajando en un carro tirado por bueyes o corceles blancos alados. En la mayoría de respresentaciones, la reconocemos por la luna creciente en su frente, que también representa los cuernos de toro o vaca. En otras ocasiones la vemos portando una antorcha, ya que ella es la luz en la oscuridad de la noche. La historia de amor entre Endimión y Selene también puede ser vista como la relación que se establece entre el crecimiento vegetativo y la luna, gobernados por el Dios de la Vegetación (Pan) y la Diosa de la Luna (Selene), donde la vegetación despierta o se duerme según el ciclo lunar.
Homero cita que Selene y Zeus (o Pan) tuvieron a Pandeia, la más Brillante, la más Divina. Ella simboliza la Luna Llena. También se cuenta que concibieron a Ersa (el Rocío), aunque también puede ser que el Rocío de la Luna Llena, que otorga todo tipo de bendiciones y refuerza todo tipo de hechizos, fuera un don concedido a los mortales por la propia Pandeia. Así que es a Pandeia, hija o la misma Selene con otro nombre y rostro, a quien debemos agradecer el rocío recogido en las noches de luna llena, y es a Ersa, el espíritu divino del rocío, a quien debemos susurrar nuestras peticiones cuando trabajemos conjuntamente.

Las Horai (las Horas o Estaciones) también son citadas en "La caída de Troya" como descendientes de Selene. Esta tríada, guarda las puertas del Olimpo de la misma manera que lo hace Cerbero con las puertas del Hades. Como hijas de Selene reciben los siguientes nombres: Talo, Carpo y Auxo. También el León de Nemea era hijo se Selene, y según Eliano "se cayó de la Luna".

A Selene se la conocía con los siguientes epítetos: Selenaia (luna), Mene (mes, referido al ciclo lunar), Aigle (claro de luna), Pasifae (la más brillante), Ilítia (comadrona, que aliva los partos). Tanto Pasifae como Ilítia, Diosas minoicas de Creta, son comúnmente consideradas Diosas lunares independientes con atributos similares.